jueves, 30 de enero de 2014

¿Cuánto te Mide?

Hoy me encuentro con ganas de jugar, con ganas de mover, de trasmitir e incluso con ganas de que me leáis, hasta incluso tengo ganas de interactuar con vosotros. ¿Qué os parece?



Es fantástico pensar así y más aún sentirlo. La realidad es que estoy escribiendo con una sonrisa dibujada en la cara, los ojos se encarcelan en la pantalla divisando lo que ven y alumbrado el camino de lo que llega. Es fácil escribir así, todo lo que ves es arco iris de colores, de simpatía, de bondad, de alegría y hasta de ganas de soñar.
La verdad sea dicha, hoy no puedo por más que quiera que escribir cosas bonitas, sensaciones lindas, momentos excepcionales, situaciones simpáticas y hasta ratos de coloquio con síntomas de risoterapia. Así es muy fácil de verdad, es tan sencillo escribir que me deslizo suavemente por mi mente para describir mis sensaciones y las comparto de forma libre con todos vosotros.



Este post es diferente porque hablo desde dentro de los sentimientos, de cómo me encuentro y os aseguro que es muy bonito poder hacerlo, todos alguna vez debemos querer tener esta sensación, porque te llena, porque te cubre con un manto angelical el alma, te sientes el superhéroe con el que soñabas de pequeño, eres como aquel ídolo que siempre has tenido y siempre recuerdas en momentos difíciles con una sonrisa y una templanza que te daba esa tranquilidad de que al final todo va a salir bien.
Y claro que sí, si quieres puedes, es cuestión de la actitud llevada al camino positivo y de la fuerza voluntad llevada a la total y constante entrega, así es cómo sobrevivimos a los efectos efímeros de la vida que nos pone batallas sin más para que podamos crecer si cabe un poquito más.


A estas alturas del post, estaréis pensando dos cosas
1) ¿Qué le pasa a éste que tan contento está?

2) ¿Cuánto me mide? ¿el qué? 

Y claro yo sigo sonriendo, reconozco que ahora con una pequeña carcajada pícara pero con gesto de entender vuestra postura.


¡Os lo cuento! Empiezo al revés y os digo, quiero saber cuánto os mide la capacidad de ser positivos, cuánto os mide en tiempo lo que utilizáis a trasformar lo negativo en positivo, cuánto os mide la capacidad de asumir que sois los mejores de vosotros mismos, en definitiva cuánto os mide el querer ser lo mejor que podáis a cada instante.


Y yo pregunto, a ti, sí a ti que estás leyendo:

 ¿Cuánto te mide querer ser feliz?


Y para terminar os contesto a la primera pregunta que os hacíais, pasar no me pasa nada, no tengo ninguna noticia especial ni tan siquiera me ha tocado la lotería, más bien es que solo quería escribir en positivo porque se puede, quería demostrar tan solo, que podemos escribir y trasmitir cuando queramos en positivo, tiene el mismo coste que al contrario pero tiene una satisfacción increíble y crea un bienestar social que hace que te sientas espectacular.






Tan solo por cambiar el concepto, por elegir mi actitud y por plasmar una serie de palabras escritas, todas y cada una con un reflejo en la pantalla de mi sonrisa. Solo quería que por un momento todo fuera buena sintonía. 

martes, 21 de enero de 2014

¿Qué Camiseta te vas a poner?

Todos los días cuando abrimos los ojos y decidimos levantarnos, lo hacemos por inercia y por costumbre, nos dejamos llevar por el día a día y así sucesivamente.


Si nos levantamos con los propósitos ya definidos, con la ilusión de alcanzar un objetivo, con el deseo de cambiar algo, modificar un modo de actuación, si nos levantamos con la idea de mejorar cada día, seguramente lo conseguiremos todo y todos.






Para ello hay que tener propósito, hay que parar a pensar y hacer un análisis de la situación, solo así podemos mejorar, solo así seremos conscientes de lo que nos queda aún por progresar. Ahora cuando me levante he decidir con que camiseta me voy a vestir. Cómo voy a salir de casa vestido, cómo me voy a enfrentar al mundo y cómo voy a defender a muerte mi camiseta.


Quizás no podamos vestirnos con las camisetas más caras y más “fashion” pero lo que sí está claro es que siempre podré elegir que camiseta ponerme de las que yo tengo. Aquí viene el gran dilema ¿qué camiseta te pones? Hay quien se pone la de triste, otros la de víctima, hay muchos que se ponen la negativa para todo, luego están los que se ponen la camiseta envidiosa, por la gran demanda de éstas parece que no hay más pero ¿cuántas camisetas tengo para elegir?


Existen muchos modelos  y somos nosotros los que elegimos que camiseta nos ponemos desde que nos levantamos. Está claro que debo ponerme la camiseta más idónea para combatir ahí fuera y si puede ser, que sea la camiseta que marque la diferencia para no ser como los demás (eso es fácil con elegir una camiseta de positividad y alegría)


En Sport Coaching siempre les pongo este ejemplo: Cuando el jugador de un equipo se pone una camiseta, lo normal es que el jugador lo dé todo por ella, se siente identificado y lucha con toda su energía para defender la camiseta y el escudo al que representa. La ventaja que tenéis es que sois un equipo y en conjunto lucháis por un mismo objetivo. Sé fiel a tu camiseta y ésta te dará su fuerza.                                                                             



En Executive Coaching hay un ejemplo paralelo en redes de ventas: ¿qué camiseta te pones para vender? Cuando salís a la venta debéis ir preparados para la maniobra y para eso uno se pone la camiseta de ganador, de vencedor, de profesional, se pone la camiseta del número 1 porque así se ha de sentir para ejecutar su trabajo. Solo si te vistes con la camiseta adecuada saldrás dispuesto a traer la venta a casa.


Y después de esto pues claro, digo que no hay diferencia para la vida personal de cada uno. ¿Qué camiseta te pones? Es la pregunta para sacar conclusiones claras al respecto, como ya dije en un post hace tiempo Motivación ¡Yo soy mi Motivación! El mejor motivador es uno mismo y para ello hay que elegir la camiseta correcta. Elige que camiseta ponerte cuando te levantes y tu día será cuando menos satisfactorio, puedes elegir camisetas, las tienes de fuerza, de alegría, de positividad, de coraje, existen incluso las camisetas de bondad, de simpatía, de humanidad, de ayuda, hay también camisetas de sonrisas, de apoyo, hay camisetas personalizadas con el nombre de cada uno pero están muy agotadas, son  camisetas de ego y se usa mucho, elige entre las anteriores así marcarás la diferencia con el resto. Y por lo menos hagas lo que hagas lo harás con la camiseta correcta.


“La vida es una ensalada que tienes que aliñar con los ingredientes más ricos que tienes en tu corazón”



                ¿Qué Camiseta te pones?


lunes, 13 de enero de 2014

¡Yo me Alegro!

El título lo dice todo, dice lo que es verdad y dice de lo que voy a hablar. Es mi sensación cuando alguien viene y me habla de su éxito, de su logro conseguido, de su bache superado, de su orgullo de mejora, etc…

¡Yo me alegro!


Es casi incomprensible que no escriba sobre ello porque es cierto, hay un número muy alto de personas que viven con la vida de los demás, con las desgracias de los demás, con las historias ajenas, todo aquello que perjudique y sea una noticia en la familia de al lado o de enfrente es suficiente para alimentar sus neuronas. Entonces es cuando empiezan a vivir, salen sonriendo de casa y casi con cara de preocupación comienzan a propagar cuantos chismes oyen, creen ver o tan solo interpretan a su modo de fantasía para crear una historia que nunca tuvo inicio de verdad.


                                 

Pues con todo esto pasando en nuestras vidas, me reivindico en la postura contraria, soy de los que se alegra por la racha de éxitos ajena, me da una satisfacción enorme ver como alguien conocido ha conseguido superarse,  simplemente ha mejorado su vida o ha encontrado un nuevo trabajo. Quizás sea raro que lo escriba, pero es cierto que me alegro, y deberíamos todos hacer lo mismo, vivir nuestra vida sin estar pendiente del mundo alrededor, y seguramente sonriamos más y seremos mejores personas de lo que ya por descontado creemos que somos.



Tenemos otro tipo de personas que también se postulan en esta área de forma diferente, son aquellos que se alegran si te va bien (siempre y cuando no te vaya mejor que a ellos) entonces es cuando ya cambian el chip, es decir, si te va bien pero no mejor que a ellos hasta te felicitan, pero si ya te va bien como para irte mejor que a ellos, la cosa cambia y se pasan al modo principal, viven su vida con la tuya (envidian)



Sigo sin entender porque nos empeñamos todos en vivir más vidas que las que nos toca y porque nos empeñamos en compartir todo lo negativo que tenemos en la cabeza, sigo pensando porque tenemos que darle siempre nuestro punto más negativo a todo. Es una mayoría generalizada la que en todo momento siguen dando matraca con sus negatividades personales a cada situación o circunstancia vivida. Esas “personas tóxicas” que siempre están para dar su negativa opinión de todo lo que no sea su vida. Pero pobre de ti como hables de la suya, eso no está bien. En fin.


“La negatividad corre por las cabezas lo que la positividad vuela por los corazones”


Me preocupa que cada día que pasa me encuentro con personas diferentes y esta misma situación, cada vez es más grande el número de personas que convierten su día a día en negativa constante y sonante.


“La vida ya está construida, nuestra manera de interpretarla es lo que modifica el sentido de la misma, tenemos que darle sentido”



Es momento de dar un impulso positivo desde nosotros, no hace falta esperar a que alguien venga a darnos un empujón en versión de noticia buena para empezar a cambiar. Es momento de empezar a construir desde dentro una energía positiva que nos lleve a mejorar nuestro segundo a segundo, solo así podremos combatir los malos momentos.

                                 


Por eso os digo que me alegro y mucho, de vuestros éxitos, de vuestras alegrías, de vuestros logros, que no hay día que no emboce una sonrisa al leer un solo logro en cualquier red, me alegro de verdad porque significa que todo esfuerzo tiene resultado, y sí, me alegro mucho también de los éxitos cosechados por las personas que no son afines a mí, por el mero hecho de que no lo sean no significa que no me alegre de que consigan superarse y mejorar. Lo siento mucho pero yo me alegro.



               Gracias a Carlos por enviarme esta imagen tan especial.

lunes, 6 de enero de 2014

Amistades del Alma

Todos en la vida cruzamos muchos caminos entre sí, caminos buenos y malos, caminos duros y llanos, caminamos en un sentido u otro pero siempre caminamos hacia algún punto en concreto. Todos en algún momento necesitamos caminar al lado, ni delante ni detrás simplemente al lado.


La verdad es que la vida te pone muchas veces pruebas a superar de una dificultad entrañable donde te encuentras abatido y vencido desde primera instancia, sin embargo y sin darte cuenta superas tus propios límites mentales y físicos y consigues aunar fuerzas para sobrevivir como buenamente puedes. Es en ese momento cuando tú mismo recuperas tu energía y empiezas una vez más a caminar, pero hay muchos de estos momentos que debes caminar al lado, ni delante ni detrás simplemente al lado.


Hay muchos tipos de personas que están en nuestra vida, nos encontramos con personas más fuertes, más listos, más seguros, más felices, etc… (casualmente a los que solemos envidiar/criticar) y también nos encontramos con personas más débiles, más cortos, más inseguros y más tristes, etc… (casualmente los que más pena nos dan) pero también nos encontramos personas arrolladoras, portadoras de éxito y felicidad así como personas tóxicas y portadoras de negatividad al cuadrado. Todo esto está en nuestras vidas y solo nosotros decidimos con mayor o menor tacto continuar a su lado y el tiempo que decidamos. Al margen de esto, siempre habrá momentos que debes caminar al lado, ni delante ni detrás simplemente al lado.


Pues sí, cuando uno tiene la suerte de poder saber elegir, de no dejarse nublar la vista por el compromiso o el tiempo de amistad, cuando no te da cargo de conciencia el parentesco, cuando te das cuenta de que te han utilizado, engañado o simplemente están a tu lado porque te necesitan pero por eso mismo te critican, cuando eres capaz de decidir por lo mejor para tu propia persona en el día a día, eso es tener un paso por delante del resto, creer en ti, confiar en ti, no depender de la sociedad ni de los círculos que te rodean y justo en ese momento, es cuando decides quedarte con lo mejor que tienes, eso no siempre significa que los tengas al lado ni tan siquiera que los hables todos los días.


Yo considero que las Amistades del Alma como las llamo e identifico, son aquellas que conforman un lazo de unión invisible que hace que las almas se fusionen en un camino paralelo y conjunto sobre todo para los malos momentos. Estas amistades son las que con el paso del tiempo marcan la diferencia, son las que cuando miras atrás para recobrar recuerdos bonitos y sinceros, siempre están. Son las amistades que nunca quieres perder, que nunca te importa pedir perdón sin has fallado, que no quieres bajo ningún concepto perderte ningún paso de su vida. Son aquellas amistades que estando en el mundo y sin compartir sangre ni apellidos se convierten en hermandades para el resto de tu vida.



“Cuando el ser humano acepte que para ser mejor necesita a los demás, dejará de mirar lo que hace él y se sentará a aprender del resto”



Y quiero dar las gracias porque a día de hoy, sabiendo elegir y sabiendo que no soy perfecto e incluso habiendo fallado, tengo “Amistades del Alma” que nunca dejaré marchar de mi vida y de mi corazón. ¡Gracias por ayudarme a construir mi vida!


             Fotografía hecha en la habitación de un niño muy especial.




No voy a nombraros, no hace falta, sabéis quienes sois, sabéis a quien me refiero pero sobre sobretodo, sabéis que os quiero.


Brindo por las Amistades del Alma que son con las que hay que caminar al lado, ni delante ni detrás simplemente al lado.




                              ¡Chin, chin!

viernes, 3 de enero de 2014

Años de Promesas

Así es como empezamos este nuevo año, lleno de oportunidades para crear y crecer. Eso es lo que debemos hacer este nuevo año, dejar a un lado todo lo pasado y encararlo con positividad y energía.


Es momento de dar un paso al frente y empezar a construir nuestro “yo” a cada instante, basándonos por supuesto en todo lo que hemos pasado y aprendido para darle una dulce salida a tan amargos momentos. Es la mejor manera de dar un golpe en la mesa. Tal y como hace la gran mayoría y ya que estamos en el gran día de las promesas, el día 1 de enero es cuando todos decidimos apuntarnos al gym (solo vamos la primera semana), dejamos de comer a lo grande y empezamos dietas estrictas (nos dura hasta que llega el fin de semana), dejamos de fumar (hasta que nos insisten tres veces y la culpa es del otro) y vamos a organizarnos nuestra semana (hasta que llegan la champions y las cervezas entre amigos). En fin, que es momento de cumplir, de hacer, de crear, de llevar a cabo, de construir y de ser serios en lo que prometemos a nosotros mismos.


¿Cuántos años llevamos haciendo promesas (las mismas)?






 Pues algo habrá pasado este tiempo atrás que no hemos llevado a cabo ninguna de ellas, ahora hay que hacer algo de forma diferente si queremos de verdad concluir con ellas. Por ejemplo, decidimos ir al gym y nos lo tomamos como una hora obligatoria de trabajo al que hay que ir sí o sí pero si no voy tengo que meter 5 euros cada día que falto en la hucha de vacaciones, respecto al tabaco debemos meter el dinero correspondiente al paquete de tabaco en la misma hucha y si cogemos tabaco de otro multiplicar por dos el valor del paquete, de cara a la dieta pongamos precio a los alimentos que no debemos comer y si caemos en la tentación tenemos que meter el correspondiente dinero establecido previamente en la misma hucha,  para la organización es tan sencillo como fijar unas multas económicas cuando nos saltamos las normas. Está claro que cuando nos tocan el bolsillo nos duele y por la misma razón nos movemos, ahora veremos si imponiéndonos nuestros propios castigos somos capaces de cumplir estas normas. Teniendo en cuenta y haciendo resumen general, hay que decir que no cumplir estas normas nos sale mucho más caro a la larga. Es decir que tenemos la oportunidad de hacer promesas, cumplirlas y ahorrar dinero que para un futuro inmediato nos va a venir muy bien.


La cuestión de todo esto es que si hacemos uso de la conciencia y la buena organización podemos conseguir cambiar por completo malos hábitos establecidos que hasta ahora no hemos conseguido vencer.


Para llevar la promesa a su cumplimiento hay que tener un objetivo general, si al dinero de la hucha le ponemos un destino de vacaciones con fecha y coste total, estoy seguro de que por unas buenas vacaciones si nos movemos y seremos capaces de mejorar nuestra calidad de vida día a día para hacer referencia a un bienestar continuado.
¿Somos capaces de auto-gestionarnos para conseguir el objetivo?
¿Dónde nos vamos de vacaciones?


“Cuando el objetivo es tentador, el camino hasta llegar a conseguirlo tan solo es un querer hacerlo”






                   ¡Felices Vacaciones!